La infidelidad es dolorosa y dejan una gran herida en las parejas, pero nos preguntamos ¿Por qué algunas mujeres son infieles para mantenerse en una relación? veámoslo
Es fácil pensar que una persona engaña para herir a otros, o que lo hacen simplemente para tener otra relación, pero la realidad puede ser un poco más complicada que eso, algunas personas son infieles para poder mantener una relación, y seguro se preguntan ¿No es algo contradictorio? y claro que lo es, pero también resulta que es una manera desesperada de mantener algo que ya no debería ser.
La infidelidad como estrategia de permanencia
Suena raro querer mantener algo siendo infiel ¿No? Pues muchas personas han visto lo «efectiva» que puede llega a ser esta medida.
La infidelidad suele interpretarse como una traición que termina con una relación. Sin embargo, para algunas mujeres, ser infiel no es un impulso de ruptura, sino una vía para continuar con su matrimonio. Estas mujeres no celebran sus aventuras: son soluciones desesperadas a una situación insostenible
Matrimonios sin sexo y frustración a largo plazo en la relación
Sabemos que el sexo es importante en una relación, pero ¿Qué pasa cuando no hay? pues llega la frustración y los problemas se hacen peor. En muchas parejas a largo plazo, el deseo sexual femenino se extingue no por una libido naturalmente baja, sino por factores como la rutina, la familiaridad y el desgaste emocional de llevar una familia.
En estos casos, el sexo desaparece, y la mujer se siente atrapada: sigue amando a su pareja, pero no está satisfecha íntimamente. El deseo resurge solo con la novedad, provocando que busque conexiones fuera del matrimonio. No se trata de buscar romance, mariposas ni validación emocional: “solo orgasmos. Punto final”.
La aventura como “solución alternativa”
El engaño no suena para nada como una «solución», pero en casos desesperados siempre surgen las medidas desesperadas. Para muchas, una aventura no representa reemplazar al cónyuge, sino llenar un vacío muy específico. Tras haber comunicado su insatisfacción sin obtener cambios, prefieren una relación fuera del matrimonio. Esta estrategia les permite sentirse más pacientes, tiernas y comprometidas con su familia, sin amenazar la estabilidad del hogar
Ejemplo: imagina que Ana ha intentado hablar con su pareja sobre sus necesidades sexuales sin resultado. Se involucra con alguien más que satisface ese aspecto—no busca un romance—y regresa a su hogar sintiéndose más equilibrada emocionalmente.
Estas mujeres gestionan sus infidelidades con precisión: establecen reglas estrictas, límites claros y evitan embrascamientos emocionales. Además, no dependen de un solo amante: muchas mantienen varias relaciones externas como respaldo. Si uno falla, tienen otro que cubra esa necesidad específica.
Ejemplo: en lugar de apostar todo a un único amante, Ana mantiene una “lista” de encuentros ocasionales. No busca poliamor, sino una logística que asegure que siempre haya alguien disponible para el tipo de satisfacción que su matrimonio no le proporciona.
Preguntas incómodas antes del “sí, acepto”
Antes de casarse deben conocer bien a sus parejas y pregúntase:
- ¿Por qué no se habla abiertamente de expectativas sexuales antes del matrimonio?
- ¿Por qué se presupone que el deseo permanecerá inalterado con el tiempo?
- ¿Por qué “solo habla con tu pareja” se considera suficiente cuando las necesidades quedan ignoradas?
- ¿Qué pasa cuando una persona quiere sexo y la otra no?
La lección es clara: la sexualidad femenina es compleja, pragmática, y no se aborda adecuadamente en las relaciones contemporáneas
Más allá del juicio moral en la relación
En lugar de ver cada infidelidad como algo escandaloso o un pecado moral, deberíamos preguntarnos: ¿cómo pueden las relaciones evolucionar para satisfacer de verdad las necesidades de ambos antes de que uno busque fuera? Si se atendieran realmente esas demandas, quizá muchas infidelidades nunca ocurrirían.
La infidelidad femenina no como rechazo, sino como mecanismo para resistir una relación que aún se valora profundamente. Su existencia evidencia carencias en la comunicación, en la negociación de expectativas y en la evolución del deseo dentro de la pareja.
Requiere que la sociedad deje de adjudicar una interpretación moral absoluta y comience a discutir sobre cómo las relaciones pueden diseñarse para sostener tanto afecto como satisfacción sexual. Solo así se evitarían situaciones donde la única “solución alternativa” sea el engaño.
¿Qué podemos hacer como mujeres antes de empezar a buscar fuera de la relación?
Entendemos las circunstancias, pero antes de hacer algo que van a lamentar, deberían poner en practica esto, puede que ayude a evitar un daño irreparable. Hablar desde la vulnerabilidad, no desde la queja: expresar lo que se necesita emocional y sexualmente, sin culpas ni reproches. Por ejemplo, decir: “Me siento desconectada últimamente y extraño cómo solíamos tocarnos”, en lugar de “Ya nunca me tocas”.
Proponer espacios nuevos para reconectar: planear citas, escapadas o simplemente momentos sin pantallas donde puedan compartir tiempo de calidad, buscar ayuda profesional juntos: acudir a terapia de pareja antes de asumir que todo está perdido. Explorar juntas nuevas formas de intimidad: muchas veces el deseo se reactiva con cambios, comunicación y apertura a nuevas experiencias sexuales.
No dar por sentado que la otra persona “debería saber”: comunicar deseos sin esperar que el otro los adivine es clave para sentirse vistas y satisfechas. A veces, buscar fuera parece la única vía porque dentro ya no se encuentra eco. Pero antes de cruzar esa línea, vale la pena preguntarse si hemos sido escuchadas… o si realmente nos hemos permitido hablar.
No sean mujeres que engañan, busquen la salud
Las relaciones no son fáciles, nada que vale la pena lo es, y requieren un esfuerzo para encontrar lo que esta mal y trabajar en encontrar una manera saludable de arreglarlo, por que si deciden usar el engaño, al final solo provocaran causar una herida que nunca sanara, será como haber roto un vidrio, estará arruinado para siempre.
Especialista: Tere Díaz. Psicoterapeuta especialista en desarrollo personal y terapia de pareja. Autora de los libros “¿Cómo identificar un patán?”, “¿Por qué nos mentimos si nos amamos?”, “Navegando la incertidumbre amorosa” en coautoría con Mónica León y audiolibro “El que busca encuentra, ¿cómo atraer y enamorar?
IG:@terediazsendra / WEB: www.terediaz.com // Psicoterapia La Montaña con más de 130 especialistas // Tel: 55 39 20 60 04 // MAIL: contacto@terediaz.com