Aprueban diputados que el Ejército esté en las calles hasta 2028

El pleno de la Cámara de Diputados aprobó con 339 votos a favor, 155 en contra y 2 abstenciones, y sin cambio alguno, las modificaciones que hizo el Senado la semana pasada, que permiten a las fuerzas armadas extender su participación hasta el 2028 en tareas de seguridad pública.

La propuesta de la diputada priista Yolanda de la Torre se autorizó con los votos de Morena y sus aliados, más los legisladores del PRI y algunos perredistas.

Tras un largo debate que se prolongó hasta los primeros minutos de este jueves, finalmente se aprobaron las modificaciones de los senadores que consisten básicamente en una evaluación semestral que hará el Congreso a las labores de los militares y dotar de un presupuesto justo para adiestramiento y equipo de las policías estatales y municipales.

El priista Marco Mendoza defendió la iniciativa que fue corregida y aumentada por los senadores y rechazó recluir a los militares en sus cuarteles, mientras no haya cuerpos policiacos bien capacitados en el país.

“Pero no podemos permitir que se vayan mientras no tengamos policías bien capacitadas. No estamos hablando de la militarización sino de recursos que beneficien a la ciudadanía y que devuelvan la paz a nuestras comunidades y familias. En México las fuerzas armadas han sido garantes de las instituciones y democracias, se trata sí, que su participación sea temporal pero no a costa de la seguridad de las familias. En el grupo parlamentario del PRI nos expresamos a favor de esta minuta”.

Contrario a esa postura, el coordinador de los diputados del PRD, Luis Espinosa Cházaro, alertó que con esta reforma se está empoderando demasiado a las fuerzas armadas lo que podría ser la antesala una dictadura militar, sin embargo, 4 de sus diputados votaron a favor de la minuta que devolvió el Senado.

Otro legislador que se manifestó en contra de la propuesta fue el diputado del partido Movimiento Ciudadano, Salvado Caro Cabrera, quien subrayó que, Morena logró una mayoría calificada con el apoyo del PRI al que presionaron para salvar a los corruptos de ese partido y algunos senadores del PRD, pero lo aprobado no frenará la violencia ni resolverá la creciente incidencia delictiva del crimen organizado.

“Con ustedes solo al narco le ha ido bien, con ustedes la divisa es la corrupción, por eso tienen a Mancera y al PRI, tiene a lo que tienen la cola larga. Y qué les podemos decir: perro con hueso en la boca ni muerde ni ladra”.

Durante el debate, los diputados del PAN subieron a tribuna con pancartas que decían: “si a la democracia no a la militarización” “Sí a la Policía Civil” “Respeto a la Constitución”.

A nombre de los legisladores del blanquiazul habló Mariana Gómez del Campo para expresar su rechazo a lo que llamó “prorrogar la estrategia fallida de seguridad del presidente López Obrador, que ha convertido los abrazos en balazos.

“Podrán vencer, pero no podrán convencer y la suya será una victoria pírrica, ustedes si están moralmente derrotados desde el momento en que traicionan lo no hace mucho pensaban y decían respecto a los militares en las calles en tareas de seguridad pública. Somos más lo que queremos unas fuerzas amadas que defiendan la independencia y soberanía de la Nación, pero que no estén al capricho de políticos y gobernantes”.

Los diputados oficialistas y del PAN se enfrascaron en una serie de recomendaciones literarias, los panistas recomendaron a los morenistas leer “El Rey del Cash”, para abrir los ojos y dejar de adorar a López Obrador, mientras que los del partido en poder recomendaron a los blanquiazules dar una lectura a “Felipe el Oscuro”, “Los Cómplices del Presidente” o el “Señor de la Muerte” que se refiere a Genaro García Luna.

Al final los morenistas gritaron: ¡si se pudo, si se pudo! Y ¡México, México, México!

La reforma constitucional que prolonga la presencia militar en tareas de seguridad publica en el país, fue turnada ya a los Congresos de los estados para su aprobación en al menos 17 de ellos, y posteriormente remitirla al Ejecutivo federal para su promulgación.