El clavadista mexicano Iñaki Hernández protagonizó una de las imágenes más conmovedoras la semana pasada al dedicara su madre la medalla de oro que conquistó en el Panamericano de Deportes Acuáticos de Medellín Colombia, un logro que al fin pudo compartir con su familia, con la que se reunió al regresar de la competencia.
Hernández, de 12 años de edad, conquistó tres medallas y fue uno de los mexicanos que ganaron 49 medallas en el Campeonato Panamericano de Deportes Acuáticos de Medellín, Colombia, aunque lo que dejó huella fue su tierna reacción al dedicar una presea de oro a su madre.
En un video publicado en la cuenta oficial del Panamericano de Deportes Acuáticos se muestra el momento de la entrevista posterior a la premiación tras conquistar la medalla de oro en la final de trampolín de tres metros.
La entrevistadora le pregunta a Iñaki qué es lo que está pensando. El clavadista mexicano, visiblemente emocionado y a punto de soltar las lágrimas, responde de inmediato: “La verdad, mi mamá no pudo venir, y se la dedico. Te amo, mamá”.
Iñaki es originario de la Ciudad de México, pero desde corta edad se mudó a Guadalajara para perseguir su sueño como clavadista.
REUNIDOS
En una publicación de redes sociales, Iñaki finalmente aparece junto a su madre, Perla, y su padre, Andrés, quienes lo recibieron tras la aventura que vivió en Colombia.
“Me siento muy contento por todo lo que provocó el video. Mi mamá estuvo muy feliz y esa era la meta. Ojalá algún día pueda llegar a ser como los grandes clavadistas que tiene México; uno en especial al que yo admiro es Germán Sánchez”, expresó Iñaki en una entrevista con La Jornada tras la difusión de su video.
El joven clavadista mostró orgulloso las tres medallas internacionales que ha conseguido hasta el momento, al tiempo que compartió su admiración por La Parka, ya que le gusta la lucha libre.
“No logré mi meta de ser luchador, pero me sigue gustando mucho ver las peleas. Es un deporte muy padre y entretenido; La Parka, en especial, me parece un atleta con carisma y mucha interacción con la gente”, añadió Iñaki, quien practicó gimnasia durante siete años.
El clavadista regresará a Guadalajara, donde, de la mano de su entrenador Salvador Chávez, discípulo de Iván Bautista, seguirá construyendo una carrera que se vislumbra exitosa.
“Aunque soy muy joven, tengo claro lo que quiero conseguir. Es muy complicado estar lejos de mi familia, pero creo que al final todo valdrá la pena”.
