Vapear es tan perjudicial para las encías como el tabaco

La Federación Europea de Periodoncia (EFP) ha advertido que los cigarrillos electrónicos pueden ser tan perjudiciales para las encías y la salud bucodental como fumar cigarrillos de tabaco tradicionales.

En este sentido, la EFP ha añadido que, “a pesar de que el fenómeno del vapeo es relativamente nuevo en comparación con el tabaquismo”, los datos de investigación muestran una clara relación entre los cigarrillos electrónicos y la mala salud de las encías y los dientes.

Para la federación, a diferencia de los fumadores de tabaco, que son más conscientes de que fumar es un factor de riesgo de salud en general y de las enfermedades de las encías, a los usuarios de vapeadores a menudo se les engaña al pensar que son menos perjudiciales o incluso seguros. Por ello, añaden que puede que el vapeo no sea menos perjudicial para la salud que fumar.

Una de las razones que explican los efectos nocivos del vapeo es la nicotina, ya sea fumada o vaporizada, que restringe el flujo sanguíneo a las encías. Otras sustancias químicas contenidas en el vapor de los cigarrillos electrónicos (como el formaldehído, el propilenglicol y el benceno) pueden aumentar agresivamente el daño en la boca, empezando por una destrucción progresiva de las encías, comenzando con una destrucción progresiva del periodonto y los tejidos que soportan los dientes.

La federación ha lamentado que “desgraciadamente”, el número de vapeadores crece a gran velocidad en todo el mundo. Este consumo en adolescentes, adultos jóvenes y personas que nunca han fumado es “potencialmente perjudicial”.

“Los daños en las encías y en los dientes, a menudo de forma irreversible, es un efecto adverso probable de vapear”, ha subrayado Andreas Stavropoulos, presidente del comité de asuntos científicos de la EFP.

“Este daño incluye la reabsorción permanente de las encías y del hueso que mantienen los dientes en función y en la boca. El tratamiento de estos problemas, dependiendo de su alcance, suele ser engorroso y caro”, ha añadido.

“Por estas razones, desde la EFP instamos a los profesionales de la salud bucodental a que no sugieran el vapeo como estrategia de transición para dejar de fumar”, ha explicado Stavropoulos.

Además, han recordado que el vapeo puede perjudicar la salud bucodental de diversas formas, como el mal aliento, irritación de boca y garganta, edema para-traqueal, laringitis, lengua negra, estomatitis nicotínica, lengua vellosa, dolor de muelas, decoloración de los dientes, caries, aumento de la cariogénesis, reducción de la dureza del esmalte y aumento del riesgo de cáncer.