FMI eleva a 3% su estimación de crecimiento mundial para 2025 pese a los aranceles de Trump

El Fondo Monetario Internacional (FMI) elevó levemente el martes su previsión de crecimiento mundial para 2025 y 2026, dadas las compras más fuertes de lo esperado antes de un aumento de los aranceles estadounidenses el 1 de agosto y una caída de la tasa arancelaria efectiva de Estados Unidos al 17.3% desde el 24.4%.

Sin embargo, advirtió de que la economía mundial se enfrenta a importantes riesgos en curso, como un posible repunte de las tasas arancelarias, tensiones geopolíticas y mayores déficits fiscales que podrían impulsar al alza las tasas de interés y endurecer las condiciones financieras mundiales.

“La economía mundial sigue sufriendo y va a seguir sufriendo con los aranceles a ese nivel, aunque no sea tan grave como podría haber sido”, dijo Pierre-Olivier Gourinchas, economista jefe del Fondo Monetario Internacional.

El FMI elevó su previsión mundial para 2025 en 0.2 puntos porcentuales, al 3%, y en 0.1 puntos porcentuales para 2026, al 3,1%, por debajo del 3.3% de crecimiento que había proyectado para ambos años en enero y de la media histórica anterior a la pandemia, del 3.7%.

Se espera que la inflación general mundial se desacelere al 4.2% en el año y al 3.6% en 2026, pero señaló que es probable que se mantenga por encima del objetivo en Estados Unidos, ya que los aranceles se trasladarán a los consumidores en la segunda mitad del año.

La tasa arancelaria efectiva de Estados Unidos -medida por los ingresos por derechos de importación como proporción de las importaciones de bienes- desciende desde abril, pero sigue siendo muy superior a su nivel estimado del 2.5% a principios de enero.

La tasa arancelaria correspondiente para el resto del mundo es del 3.5%, frente al 4.1% de abril, dijo el FMI.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha puesto patas arriba el comercio mundial al imponer un arancel universal del 10% a casi todos los países a partir de abril y amenazar con gravámenes aún más altos que entrarán en vigor el viernes.

Los aranceles mucho más elevados impuestos por Estados Unidos y China quedaron en suspenso hasta el 12 de agosto, y las conversaciones de esta semana en Estocolmo podrían conducir a una nueva prórroga.

Estados Unidos también anunció la imposición de aranceles elevados, entre el 25% y el 50%, a los automóviles, el acero y otros metales, y aún están pendientes gravámenes más elevadas a los productos farmacéuticos, la madera y los semiconductores.

Estos futuros aumentos arancelarios no se reflejan en las cifras del FMI y podrían elevar aún más las tasas arancelarias efectivas, crear cuellos de botella y amplificar el efecto de los aranceles más elevados, según el FMI.