Maneja con clase a las personas difíciles

¿Cuántos de ustedes no se han topado con personas difíciles? Nos referimos a esas personas que son imprudentes, pero se quejan de todo, pero no saben ver lo bueno de la vida… o sea les pasa todo, hoy les explicamos cómo sortearlos de la manera más amable.

Hoy invité a mi querido Álvaro Gordoa para que nos hable sobre las personas difíciles y cómo evitamos que nos arrastren con ellos a todas sus imprudencias y negatividades.

¿Sabían que el 75% de las personas entre 25 y 45 años ubican al menos DOS personas difíciles en su vida? Entre estas personas difíciles:

  • 30% son las hermanas
  • 27% son las esposas
  • 24% son las madres
  • 20% son los maridos
  • 18% son los roomies
  • 13% son los padres
  • 13% son los hermanos

Y el 67% de las personas entre 46 y 70 años ubican al menos UNA persona difícil en su vida. Entre estas personas difíciles:

  • 29% son las mamás
  • 28% son las parejas femeninas
  • 24% son los papás
  • 24% son los roomies
  • 19% son los hijos
  • 16% son las hijas
  • 15% son los maridos
  • 14% de las parejas masculinas
  • 13% son las esposas

Para ambos grupos, las personas menos difíciles son los amigos.

Tipos de personas difíciles 

Aquí les enlistamos a todos aquellos que literalmente nos hacen la vida difícil y algunas veces hasta drenan nuestra energía, pero también les damos las técnicas para que puedan sortearlas.

Downers

Son personas que tienden a tener una actitud negativa y pesimista en la mayoría de las situaciones. No te dejes arrastrar por su negatividad. Mantén una actitud positiva y no permitas que sus comentarios te afecten emocionalmente.

Evita alimentar su negatividad. No les des demasiada atención cuando se quejen o hablen de manera negativa. Cambia de tema o intenta redirigir la conversación hacia algo más positivo. Trata de mostrar empatía y comprensión hacia ellos. A veces, su actitud puede ser el resultado de problemas personales o dificultades que están enfrentando.

Anímalos a ver el lado positivo de las cosas. Comparte historias o experiencias positivas que puedan ayudar a cambiar su perspectiva.

Showoffs

Son personas que buscan constantemente atención y admiración de los demás. No les des el protagonismo que buscan. Evita elogiarlos o prestarles demasiada atención cuando intenten destacar o presumir.

Mantén tu enfoque en ti mismo y en tus propias metas. No te compares con ellos ni trates de competir por atención o reconocimiento. Si es necesario, establece límites claros. Si un «Showoff» te interrumpe o te desvaloriza, exprésale de manera educada que aprecias su confianza, pero que también valoras tu espacio y tus opiniones. Fomenta un ambiente de colaboración y respeto. En lugar de alimentar su necesidad de sobresalir, destaca las fortalezas y contribuciones de todos los miembros del grupo.

Pasivos

Tienden a evitar conflictos y tomar decisiones. Pueden ser difíciles de tratar cuando se trata de resolver problemas o avanzar en un proyecto. Sé claro y directo en tus comunicaciones con ellos. Expresa tus expectativas de manera concisa y asegúrate de que entiendan lo que se espera de ellos.

Anímalo a que comparta su opinión y tome decisiones. A veces, los «Pasivos» simplemente necesitan un estímulo adicional para expresarse. Ofrece apoyo y ayuda si se sienten abrumados o indecisos. Puedes brindarles opciones o sugerencias para facilitarles la toma de decisiones.

Sé paciente y comprensivo. Cambiar comportamientos pasivos puede llevar tiempo, así que no los presiones demasiado. Celebra los pequeños logros y muestra aprecio por su participación.

Tanks

Son personas que suelen ser directas, agresivas y dominantes en su forma de comunicarse. Mantén la calma y no te involucres en confrontaciones innecesarias. No cedas a su agresividad ni respondas con la misma actitud.

Establece límites y haz valer tus derechos. No permitas que un «Tank» te menosprecie o te trate de manera irrespetuosa. Expresa tu desacuerdo de manera asertiva y firme. Busca áreas de acuerdo y enfoquen la discusión en soluciones. Evita entrar en debates sin fin y trata de encontrar puntos en común para buscar una resolución constructiva.

Si es posible, encuentra un momento adecuado para hablar con el «Tank» de manera privada y calmada. Explícale cómo su actitud agresiva puede afectar negativamente la dinámica del equipo o la relación interpersonal. Fomenta un ambiente de respeto y colaboración. Anima a todos los miembros del grupo a expresar sus opiniones y preocupaciones de manera respetuosa y constructiva.

Si el comportamiento del «Tank» persiste y afecta seriamente el ambiente de trabajo o las relaciones interpersonales, considera hablar con un supervisor o encargado de recursos humanos para buscar una solución adecuada. Recuerda cuidar de tu bienestar emocional. Si es necesario, busca apoyo de colegas, amigos o profesionales para lidiar con el estrés o la ansiedad causados por la interacción con personas difíciles.

Fuente: Álvaro Gordoa. Consultor en Imagen Pública, rector del Colegio de Imagen Pública. Autor de los libros Imagen Cool, El Método H.A.B.L.A y La Biblia Godínez.